martes, 21 de febrero de 2017

La sombra para mí es...

Para mí la sombra es…
Una parte de nosotros que no queremos reconocer, que no aceptamos por miedo o vergüenza, ese lado que no queremos que vean de nosotros los demás, y que ocultamos tan al fondo que terminamos por no verlo ni nosotros mismos. Rechazamos tanto esta parte de nosotros que incluso odiamos a la persona que la tiene y no la oculta. Pero… ¿por qué odiamos a quien exhiben sin complejos lo que a nosotros nos da miedo enseñar? Quizás no odiemos a esas personas, si no que en realidad nos odiamos a nosotros mismos, por cobardes, acomplejados y por dejar que la sociedad nos diga cómo debemos actuar y ser.

Desde que nacemos podemos observar como la sombra se va tornando en oscuridad más allá del hecho físico. ¿Por qué la mayoría de los malos y malas de cuentos y películas llevan ropa negra u oscura? Para mí hay un símil evidente entre la relación de la maldad y la sombra humana. Un lado oculto que se entiende como perverso y maligno. Esta percepción social de la oscuridad como lo negativo, quizás sea lo que la hace negativa. Los prejuicios sobre aspectos físicos o conductas que no encajan en los cánones de “la luz”/la sociedad, y que esta rechaza, de alguna manera se tienen que proteger de esta discriminación, ahí es donde nace “el lado oscuro”.

El lado oscuro, como yo lo entiendo, no trata de destruir el mundo como sale en las películas, eso es lo que nos quiere hacer entender “la luz” para ponernos en su contra y seguir haciendo que pensemos según sus ideales. El lado oscuro, se forma de todas esas cosas que la sociedad nos obliga a rechazar y a avergonzarnos de ellas, se forma de todas esas cosas que nos hacen distintos al resto, cosas que nos hacen únicos. Quizás la intención de “la luz” no sea tan buena y lo único que pretenda es que sigamos siendo un rebaño de ovejas, eso sí, TODAS BLANCAS Y CON EL MISMO ESQUILADO. Todos tenemos de forma obligada nuestro lado oscuro, ya sea por comprar ropa que nos haga más delgados/as; unos zapatos que nos hagan más altos/as; por operarnos la nariz, ya que no encaja con los cánones de belleza que marca la sociedad; por sufrir en el gimnasio para tener un culo o unos abdominales duros y marcados, ya que sin estos rasgos, jamás encontraremos pareja y nadie nos querrá y moriremos solos y solas rodeados de gatos… El lado oscuro se forma de todo eso que queremos esconder, mi michelín, mi estatura, mi nariz, mi culo blandito o la tripa que me sirve para apoyar cosas cuando estoy en el sofá.

La sombra se crea por la existencia de luz, metafórica y literalmente. Pero la sombra se hace negativa cuando es discriminada por la luminosidad, la brillantez y el esplendor que emite la perfección de la sociedad. Hagamos como Peter Pan y cosámonos bien fuerte nuestra sombra, al principio dolerá como le dolía a él, pero si la lucimos con orgullo, la aceptamos, la queremos y la hacemos nuestra marca distintiva del rebaño, quizás, solo quizás, el “lado oscuro” deje de serlo tanto.


Adrián Erriquez Gistau

1 comentario:

  1. Gracias Adrián por tu hermosa reflexión. Dicen los analistas de símbolos que el mediodía siempre se vio como el momento más inquietante, porque la sombra no está. Estoy en ello, ojalá y podamos integrar bien esa sombra que riquezas tiene y ayudarnos unos a otros con compasión y con amor

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